Por un momento pensemos en alguien, una persona, quizás el término persona esta poco valorado ya que vemos alguien y no somos concientes de que detrás de esa piel hay una vida, llena de otras personas, recuerdos, momentos, lágrimas, sonrisas, que aquel o aquella que miramos no es tan diferente a nosotros. Cuando hayáis imaginado esto, quiero que penséis la de casualidades, la de pequeños detalles que forman la vida del individuo en cuestión, y ahora pensad en un hombre o una mujer, que por influencia de otros, se encuentre en un abismo del que parece que no puede salir, que cuando parece que nada puede salir peor, ocurre otra cosa que hace que este rozando con los dedos el fondo, como si estuviera a un paso de morir aún siguiendo vivo y es cuando de pronto este o esta cree que su vida no tiene sentido, pobre aquel que piense eso, porque eso sería decir que ha dado el paso a el fin de su vida.
Sara.
